«El momento exige cerrar filas, tercamente, en defensa histórica de la soberanía nacional«

Desde el pasado mes de agosto hasta hoy, vivimos en Venezuela una constante zozobra a raíz de la presencia militar de EEUU en el Caribe, todo bajo el manido argumento de una ofensiva del gobierno norteamercano para evitar que lleguen drogas a su pais.

Ese comportamiento intervencionista en el Mar Caribe, desconoce voces autorizadas de la ONU y otros investigadores que indican que el 90 % de los estupefacientes que llegan al norte, lo hacen principalmente, por la vía del Océano Pacífico

Con el desarrollo de esta recia crisis que lleva 4 meses, ha quedado claro que el Imperialismo Norteamicano ha desarrollado la engañosa narrativa de la Venezuela productora y exportadora de cocaína y fentanilo, acompañada con la falsedad del Cartel de los Soles dirigido desde el gobierno venezolano, recien decretado como organización terrorista enemiga de los EEUU y contra quienes se justifican todo tipo de acción militar para su aniquilamiento.

Lo que no se dice desde el el gobierno de la potencia gringa, es que el plan real es producir un cambio de gobierno en nuestro país, apoderarse de sus recursos naturales y a la vez intentar la supremacía, el dominio norteamericano en el mar Caribe estropeando el libre tránsito y comercio que muchos países hacen con Venezuela y otros países latinoamericanos a través de esas aguas. También es oportuno señalar que, si bien siguen siendo una potencia imperial, su dominio político, económico y militar ha decaído en los últimos años. Con esta amenaza en el Caribe lo que pretenden es recuperar gobiernos que les son incómodos para sus propósitos y seguir dominando a América Latina. Esa es la esencia real de esta maniobra en desarrollo. No nos engañemos. Ese argumento de «recuperar la democracia» resulta grotesco por cuanto su historia pasada ha sido imponer gobiernos dictatoriales, caso Chile, Nicaragua, Argentina y recién apoyan gobiernos no tan democráticos como el de Arabia Saudíta, Afganistán, Qatar y pare usted de contar .

En estos meses muchos han expresado de forma institucional e individual, opiniones sobre este tema . Diferentes enfoques han estado en el tapete, algunos países latinoamericanos lo han hecho. Factores de la vida nacional nos hemos pronunciado, llegan mensajes de otros continentes, parlamentarios, artistas, universitarios y dirigentes políticos de Venezuela y otras partes del mundo, algo han dicho sobre lo que sucede en el Caribe.

Con base a opiniones del partido que represento, Soluciones Para Venezuela, me permito expresar algunos mensajes con destinos directos:

A los Venezolanos en General, el momento exige cerrar filas, tercamente, en defensa histórica de la soberanía nacional y hacerlo sin ambajes, sin miedo al chantajes, sin duda alguna. Es la patria, es el territorio, lo que está en discusión y peligro de ser intervenido por una potencia extranjera. Ponernos de su lado, no significa que no tengamos opiniones critica de la manera como se están conduciendo algunas políticas de estado, para lo cual seguramente tendremos tiempo y espacio para intentar corregir y cambiar. No puede una potencia extranjera, ninguna, y lo decimos con firmeza, erigirse como emperadores, al querer implantar gobiernos serviles y mucho menos adueñarse de las riquezas de nuestro territorio.

A la Oposición Antidemocrática y Extremista, la cual es reincidente en su política de ponerse del lado del gobierno norteamericano en sus planes de apoderarse de nuestro país, e incluso, hoy descaradamente se lo ponen en subasta si eventualmente lograran un cambio de gobierno producto de una intervención militar o cualquier otra via antidemocrática. Ese sector opositor conducido por ideas de derecha rancia y entreguistas, podrán haber nacido en Venezuela, pero su comportamiento es totalmente antinacional, antivenezolanista. A los sectores populares, descontentos con sobradas razones con muchas políticas gubernamentales y que de manera confundida siguen creyendo en las narrativas de esa oposición apatrida, debemos explicarles bien el peligro que hoy nos acecha como nación. Solo seremos ciudadanos de tercera bajo su dominio. No permitamos que nuestro resentimiento, nuestras frustraciones, por la ineptitud del gobierno, nos desborde. La gente puede entender que ese liderazgo opositor extremista, radicado principalmente en el exterior, solo está por sus intereses y al servicio de diferentes potencias económicas hambrientas del petróleo y otros recursos naturales en nuestro país.
A ese sector antinacional, le decimos, que seguiremos trabajando arduamente por derrotar su maniobra y mentira al querer confundir a la gente con la falsa premisa de que quienes defendemos la soberanía nacional ante el acoso norteamericano, estamos defendiendo al gobierno del presidente Maduro. Son dos cosas diferentes y sin ningún dilema ni contradicción, los venezolanos hemos de defender nuestra patria ante cualquier peligro intervencionista y colonialista.

A los Países Latinoamericanos
El llamado es a reaccionar de modo más urgente. Lo que puedan intentar los militares norteamericanos con invadir o atacar a Venezuela, también puede suceder contra cualquiera de ellos en cualquier momento. Hemos de plantarnos firmes y unidos como continente para defender el legado, la historia independentista bolivariana, que es la historia del antimperialismo, la soberanía y de la patria grande.

A los Sectores Democráticos Internos
Toca continuar y profundizar los esfuerzos unitarios de organización y movilizacion en función de seguir alertando y denunciando el grave peligro que hoy se cierne sobre el país. Hay de actuar con mucho espíritu de amplitud, evitando tomar ventajas sobre otros connacionales. Definir, al mismo tiempo, una clara línea de autonomía y de acompañamiento al gobierno, en tareas exclusivas del plan de defensa de la soberanía nacional, legado histórico y constitucional, el cúal defenderemos de manera irreversible.

Al Gobierno Nacional
Al que de manera particular evalúo con un buen desempeño en el manejo de esta crisis. Más allá de conceptos ideológicos, el gobierno cumple cabalmente su responsabilidad constitucional de liderar la defensa de la soberanía nacional. Lo hace con aplomo, prudencia, diplomacia, estrategias militares, firmeza, organización y movilización popular y con sentido incluyente. Aunque con respecto a ésto último, quiero dejarle algunas recomendaciones:
. Sería un momento oportuno para que el gobierno promueva un proceso de Amnistía General, proclive a lograr más escenarios internos de paz y reconciliación.
. La buena iniciativa de conformar con amplitud el Consejo Nacional de Soberanía y Paz, debe ser confirmada y reafirmada aguas abajo en estados y municipios, con la inclusión formal de diferentes actores de la vida nacional, que no siendo funcionarios del gobierno ni militantes de los partidos que gobiernan, somos venezolanos
auténticos con toda la voluntad, decisión y compromiso de involucrarnos en los planes concretos que se desarrollan en pro de la participación masiva para defender la soberanía nacional con el venezolanismo que nos caracteriza.
. Quizás ya lo tengan contemplado, pero sería bueno que desde el gobierno se ponga en práctica un contundente y masivo plan de difusión, información y recomendaciones específicas de lo que debería hacer la población no organizada, en caso de presentarse situaciones no deseadas ante la posibilidad de que este conflicto escale a niveles superiores. Protección Civil, Cuerpos de Bomberos, Grupos de Rescates Especializados, afines al estado, deberían poner en práctica esta recomendación o algo parecido a eso, ante un evento masivo que ronda en el ambiente.

No vacilemos en defender a Venezuela de intereses imperialistas y colonialistas

Por Venezuela, sigamos atentos y luchando

Atte
Miguel Vásquez
Secretario General Nacional de Soluciones Para Venezuela.
Caracas, 25 Noviembre 2025